El acelerado crecimiento que ha experimentado China en las últimas décadas tiene un alto costo para el gigante asiático en materia ambiental. En primer lugar la contaminación es la principal causa de muerte de 8.600 personas cada año, cifra que, lamentablemente, aumenta con el transcurso del tiempo. Y desde una perspectiva económica, genera pérdidas superiores a los mil millones de dólares.

Además las pérdidas económicas alcanzan los mil millones de dólares. El rápido crecimiento económico es la causa principal, según estudios científicos.

Estudios llevados a cabo de manera conjunta por la Universidad de Beijing y la ONG ambientalista Greenpeace, detectaron un exceso de partículas PM 2.5 en el aire de Beijing, Shanghái, Guangzhou y Xi’an. PM2.5 es la denominación a pequeñas partículas sólidas o líquidas de polvo, cenizas, hollín, metálicas, cemento o polen en la atmósfera. Son menores a 2.5 micrómetro, o 100 veces más delgadas que un cabello humano.

En ese sentido, el gobierno central instó a las mencionadas ciudades a divulgar públicamente los informes de PM2.5 en el aire, así como los efectos que tiene en la salud. Expertos han comprobado que abundantes partículas de este tipo inciden en enfermedades cardiovasculares, cáncer de pulmón, entre otras.

Fuente: El Comercio