“La inversión extranjera directa es fundamental en nuestro modelo de crecimiento”. Así explicó ayer el ministro de Economía y Finanzas, Luis Miguel Castilla, el interés del Gobierno Peruano por atraer a los empresarios árabes que participaron en el ASPA. “Gracias al impulso que provoquen estos nuevos capitales, el Perú se consolidará como el segundo mercado de Sudamérica en captar inversión foránea para convertirla en parte fundamental de su PBI, después de Chile”, afirmó el titular del MEF.
El gobierno remarcó ante líderes y empresarios árabes que en el Perú hay un entorno amigable para las inversiones.
Durante su exposición en el Swissotel, Castilla destacó que el marco legal que acompaña a las apuestas empresariales del exterior favorece su crecimiento. “Aquí, los inversionistas árabes encontrarán un entorno amigable para sus inversiones: estabilidad macroeconómica, libre cambio de moneda, trato igualitario para capitales nacionales y extranjeros, y la posibilidad de repatriar las ganancias que se generen”, detalló.
Hasta ahora, los capitales de afuera se han enfocado en el sector energético, en la infraestructura y en la industria de los servicios. El Gobierno ha propuesto, además de estos sectores, la exploración y explotación de hidrocarburos y el turismo.
Según el presidente del Consejo de Ministros, Juan Jiménez, Pro Inversión trabajó en modelos de negocios como las asociaciones público-privadas (AAP) y las obras por impuestos para presentárselos a los inversionistas del ASPA.
El primer ministro confirmó que los árabes estudiaban destinar US$200 millones en proyectos hoteleros y que también habían expresado interés en levantar un megacentro comercial en la Costa Verde, tal como lo adelantara a El Comercio la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), la semana pasada.
Al respecto, el presidente de la Asociación Islámica del Perú, Damin Husein Awad, dijo que tales desarrollos estaban en negociación, y aunque no se animó a precisar qué empresas del Medio Oriente estaban animadas, sí adelantó que un buen grupo provenía de Jordania. “Los representantes de estas compañías no resuelven su inversión inmediatamente. Lo que sí hay es el compromiso de volver a juntarse con sus pares peruanos en el corto plazo”, añadió.
En los rubros de hotelería y turismo, los árabes prefieren apostar a través de fondos de inversión y no con marcas propias, de modo que aquí podrían ingresar franquiciando las de reconocidas cadenas como Starwood y Marriott.
VAN POR MÁS SECTORES
En las ruedas de negocios que se desarrollaron en el Swissôtel, también se discutieron proyectos para la agroindustria y el sector energético, además del comercio, sobre todo dirigido a la clase media.
Mehdi Al Amine, director del banco de inversión deNovo, confirmó que estudiaba estos desarrollos aquí, y que en el sector energético, los árabes tenían mucha experiencia que aportar.
LOS ÁRABES EN EL PERÚ
Inversión actual. Las inversiones del bloque árabe en el Perú fluctúan entre los US$1.800 millones y los US$2.070 millones, a la fecha.
Sus empresas aquí. En el Perú están presentes compañías de Emiratos Árabes Unidos y Argelia. Figuran DP World y General Petroleum, entre otras.
Fuente: El Comercio
