Cinco posturas corporales que pueden ´costarte´ el trabajo

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Aunque no lo imagines, nuestro cuerpo puede revelar muchas cosas sobre nosotros a través de simples gestos o posturas. Por ejemplo, si nos encontramos en una entrevista de trabajo, en una exposición, en una sustentación final, el lenguaje corporal puede decir más que nosotros mismos.

Saludo de manos

El lenguaje corporal es muy importante a la hora de interactuar en la oficina o cualquier ámbito laboral, toma es cuenta estas posturas y corrígelas si te identificas.

Según Ivonne Vargas Hernández, especialista internacional en temas laborales y columnista de CNN digital, el 93% de una plática está conformada por mensajes de lenguaje no verbal.

Frente a un reclutador de trabajo, los mensajes no verbales pueden ser tu mejor arma para conseguir empleo; la mirada, la gesticulación y la postura corporal son elementos que debes cuidar en tu expresión, apunta la especialista.

Nuestras posturas son capaces de transmitir muchas más cosas de las que pensamos. Toma nota de algunas claves que debes tener en cuenta para dominar tu lenguaje corporal.

1. Cruzarte de brazos
Esto gesto significa que no eres muy ´abierto´ a las opiniones y sugerencias de los demás. Si tienes que estar parado, mantén tus brazos de lado.

2. Saludo de manos ´débiles´
Significa que te sientes intimidado, y no muestras suficiente confianza. Esto puede ser un error, pues de haber algún proyecto importante, podrán no tomarte en cuenta.

3. Postura encorvada
Mantenerte derecho con tus hombros erguidos marca confianza y seguridad en ti mismo. Si te presentas encorvado pasa exactamente lo contrario y aparecerás como una persona temerosa que no se tiene fe en sí misma.

4. Mirar al piso cuando hablas
Es una clara señal de desinterés o porque te sientes inferior a la persona con la que estás hablando. El contacto visual es importante, para mantener firme una posición o idea.

5. Invadir el espacio personal
Cuando tengas alguna conversación con tu jefe o algún miembro de tu trabajo no olvides que mantener el espacio personal es importante (una línea imaginaria que divide 50 centímetros de distancia). De lo contrario, puede entenderse como una agresión u ofensa.