Un reciente video muestra a los reclutas, entre ellos niños de 11 años, practicando taekwondo y aprendiendo a marchar al unísono.

“Debido a la situación actual, estoy tratando de estudiar más”, confiesa uno de los alumnos, Jo Chung-hyok.

“De verdad creo que es así como puedo conseguir mi venganza contra los imperialistas norteamericanos: recibiendo las mejores notas en clase”, declara el muchacho agregando que es su “deber revolucionario”.

“Estoy trabajando muy duro para conseguir las mejores notas en asignaturas militares como tácticas y tiro”, cuenta el futuro soldado.

“En este momento, la situación en la península coreana es tensa, y América es mala para nosotros”, explica el teniente coronel Kim Hak-bin, administrador de la academia.

“Nuestros estudiantes están preparados para ir al frente de batalla siempre que estalle una guerra, y ahora están estudiando más de lo habitual”.

La escuela, situada cerca del lugar de nacimiento del primer líder de Corea del Norte, Kim Il-sung, fue creada en 1947 para albergar, alimentar y educar a los hijos e hijas de soldados que fallecieron luchando contra los japoneses entre 1910-45. Actualmente, las chicas se encuentran en otra academia, la Escuela Revolucionaria Kang Pan-sok, que lleva el nombre de la madre de Kim Il-sung.

La península de Corea está viviendo actualmente una época de gran tensión. No cesa el intercambio de amenazas y demostraciones de fuerza por parte de Pyongyang, Washington y Seúl, así como las declaraciones de la comunidad internacional al respecto y pronósticos de expertos sobre el posible desenlace de esta crisis.

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