A pesar de las adversidades, este perro ha demostrado sus ganas de vivir, de darle continuidad a lo que muchos creyeron que faltaría, de recorrer los pastos de Jordania cerca de cabras, ovejas, caprinos y ovinos.

Lección de vida es la que nos da este perro que nunca perdió el optimismo.

Hace dos años, Abayed quedó inválido por el impacto de una bala que destrozó su espina dorsal, pero nunca perdió las esperanzas, esperanzas que entusiasmaron a un centro de bienestar animal que no dudó en ayudarlo a que siga por esta vida.

Ahora utiliza ayuda mecánica, pero su vida sigue tal cual, aunque hay que admitirlo, es querido por los pobladores de Amman, quienes lo alimentan y le dan de beber agua, Abayed no se niega, acepta gustosamente,

A sus seis años, es un ejemplo para todos los humanos, salir adelante, ante cualquier obstáculo.